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La torre, aunque muy remozada presentaba cierto aire mudéjar, presentando cinco cuerpos, estando rematada por un chapitel que a mediados del siglo pasado sería sustituido por cubierta de teja a cuatro aguas. En el cuerpo superior principalmente, se abrían sendos vanos para alojar las campanas, algunos de los cuales fueron cegados.
En la fachada principal presentaba un adusto muro enjalbegado, en el cual se abrían pequeñas ventanas con la finalidad de proporcionar luz a la nave interior, ya que por el lado sur el templo carecía de iluminación al estar adosado al mismo desde 1587 el Convento de San Bernardo. Este cerramiento se produjo a raíz de trasladarse a Benavente la comunidad religiosas cistercienses desde el cercano pueblo de Santa Colomba de las Monjas.
El pórtico estaba sustentado por dos grandes columnas clasicistas de estilo dórico, cuyos capiteles presentan grandes volutas. El atrio se encuentra cerrado en sus laterales por sendas verjas de hierro que se alzan sobre pretiles o banco de piedra corridos. Un gran arco apuntado formado por tres niveles de arquivoltas se abre a la nave, enmarcado todo ello por un enfoscado que trata de imitar simétricos sillares. Su aspecto es de sobriedad, careciendo de motivo decorativo alguno. Los desconchados laterales del muro delatan lo artificioso de la obra ya que dejan al descubierto el adobe y la piedra de mampuesto. Bajo este atrio tenía lugar, antes de su traslado al nuevo templo del Carmen, la solemne ceremonia de Juramento de silencio por los caballeros cofrades del Santísimo Cristo de la Salud, en la tarde-noche del Miércoles Santo.
En el lateral inferior de la fachada principal se observa en algunas de las imágenes una pequeña construcción adosada al templo, al parecer se trata de una de las paneras de las que disponía el templo. En el pasado muchas de las rentas de las parroquias procedían de las tierras de labor y fincas que eran legadas en testamento por los fieles más acaudalados. Dichas rentas se cobraban en buen parte en especie, es decir en grano o cereal, y a ello obedece en algunas ocasiones la existencia de estas construcciones anejas a los muros de las iglesias.
Con anterioridad a la edificación del monasterio de bernardas esta iglesia de Renueva debió de tener acceso también por este lado meridional, tal y como revela precisamente una de las fotos que aquí reproducimos. Con ocasión del derribo del Convento quedó al descubierto el muro sur de la iglesia, que hasta entonces estaba oculto como consecuencia de la edificación del mismo en el siglo XVI.
Una de las fotografías permite distinguir embutidos diversos vanos y grandes arcos que en otro tiempo se abrieron a la nave, los cuales posteriormente serían cegados. Uno de estos arcos podría pertenecer casi con seguridad a una capilla con reja que existía junto al altar de Santa Lucía, y que en su día fueron abiertos para que las monjas pudiesen cultos y oficios religiosos desde el contiguo monasterio. Se abrió además en este muro un coro alto, todo ello merced a un pacto de derecho de uso de la iglesia, ya que las religiosas al trasladarse a Benavente en principio no disponían de templo, hasta que avanzado el siglo XVII se construya capilla en el propio convento.
Juan Carlos de la Mata Guerra.
Enlace: Santa María de Renueva (Recopilación Fotográfica)
1 comentario:
Muy interesante artículo, es un placer aprender cada día algo nuevo de nuestra historia.
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