Jóvenes Cofrades (2)

I Encuentro de Jóvenes Cofrades
Resumen de Prensa, 7 de febrero de 2009

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La Luz del Farol - Alberto García Soto

Futuro... y presente. Los jóvenes no solo estamos en las cofradías, somos también hermandad, y por tanto participamos en ellas plenamente. Ayer celebramos el I Encuentro de Jóvenes Cofrades y con la treintena larga que asistimos creamos un entorno acogedor, de debate, de ideas, de propuestas, de oración. No termina aquí la labor que se debe hacer, se debe ir más allá, pero la primera piedra está puesta. Nuevamente Benavente y Toro demostraron su sentimiento de pertenencia a la diócesis y enviaron delegaciones bien nutridas, que proporcionalmente igualaron a la de la capital. Una buena experiencia que esperemos dé fruto.

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La Opinión de Zamora

Éxito de asistencia en el «I Encuentro de Jóvenes Cofrades» de la Diócesis. La propuesta de celebrar en el Seminario de San Atilano el «I Encuentro de Jóvenes Cofrades» de la Diócesis de Zamora, fue bien acogido por parte de los fieles, de entre 15 y 35 años, que se dieron cita en torno a una conferencia titulada «Jóvenes en cofradías».

También hubo tiempo para debatir acerca del futuro de estas congregaciones religiosas y de proponer ideas de futuro para afrontar los nuevos tiempos. A la derecha de la imagen, en primer término, aparece el delegado episcopal para las Cofradías y Hermandades, Miguel Ángel Hernández, organizador del evento.

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El Norte de Castilla - M. J. Pascual

Jóvenes cofrades exigen a las juntas «que vayan más allá de los desfiles». Medio centenar de hermanos menores de 35 años abren el debate sobre el futuro de las cofradías.

Las cofradías tienen que ir más allá de los desfiles y favorecer el relevo en las juntas directivas. Son dos de las primeras conclusiones del debate que por primera vez se abre entre jóvenes cofrades de la provincia. Medio centenar de jóvenes menores de 35 año acudieron a la cita en el Seminario, la mayoría pertenecientes a hermandades de Semana Santa y de la capital, aunque también tuvieron representación otras asociaciones de fieles de Toro y Benavente.

El primer encuentro de jóvenes cofrades propiciado por la delegación para las cofradías y hermandades del Obispado, tiene como objetivo «iniciar un movimiento cofrade juvenil donde se reflexione para construir la Semana Santa y la religiosidad popular en conjunto con las cofradías de Gloria en un ambiente de consenso», explicó el delegado diocesano, Miguel Ángel Hernández.

En un momento en el que la revisión de los estatutos de algunas hermandades de Semana Santa están en el centro de la polémica, esta experiencia se plantea como «un espacio de convivencia para que las nuevas generaciones de cofrades tengan puntos de contacto, reflexionen y participen en la identidad de las cofradías».

Redes sociales
Las redes sociales en Internet han sido el vehículo principal utilizado para que los jóvenes se informaran de la convocatoria, aunque también algunas hermandades, como El Silencio de Benavente o el Santo Entierro de Zamora mandaron delegados «oficiales» al encuentro o informaron directamente sobre él, animando a la participación de los jóvenes, indicó Hernández.

Al nacer
Los participantes en el debate tienen entre 15 y 35 años y casi todos fueron inscritos en una o varias cofradías al poco de nacer por sus familiares o incluso por los padrinos o amigos de sus padres como regalo.

Casi todos ellos pertenecen a más de una hermandad, como las hermanas María y Elisa San Nicolás, que además de desfilar en Semana Santa, forman parte de las cofradías de la Virgen de la Guía, Nuestra Señora de San Antolín (la Virgen de la Concha) y de la cofradía de las Ánimas de San Lázaro. Del foro, esperan «conclusiones sobre lo que se espera de los jóvenes comofrades a nivel diocesano, pues seguramente la mayoría estamos exclusivamente para los desfiles procesionales y una hermandad no tiene que estar solamente para eso; vamos a ver que pautas se dan desde aquí sobre como compatibilizar lo de ser joven y cofrade».

Coinciden otros participantes consultados en que el sentido religioso de la Semana Santa se diluye demasiado, y más entre los jóvenes. «No es de recibo que algunos se cuestionen que haya que estar bautizado para salir en las procesiones». Agustín Crespo Casado, que desfila en el Vía Crucis y en las Damas de la Esperanza apunta que «mucha gente desea desfilar y no por motivos religiosos».

Para ellos, lo más positivo ha sido «la posibilidad de conocernos, compartir experiencias y poner puntos en común».